domingo, 29 de agosto de 2010

Vuelvo al mito

Vuelvo al mito y llevo la mitad. ¿Por qué volví? En un principio adquirí el libro por morbo, por puro frikismo tal vez, sin casi intención de leerlo. Pero debía descansar de leerla a Ella de alguna manera y ahí estaba, saludándome con su gran título en rojo sobre un fondo oscuro y con un castillo, porque no puedo aparcar una lectura sin coger otra.

Y hace dos días. Y ya llevo la mitad. Y quiero terminarlo pero no quiero que termine.
Pensé que sería basura, y estoy flipando por ahora. Es fantástico reencontrarse con estos viejos amigos, estos sufridos héroes, surgidos de mi novela favorita. Es genial pero da lástima. Sin olvidarse, claro, de las nuevas incorporaciones, que no se imaginan lo que les pueda tener preparado el empalador.

Vuelvo al mito. Vuelvo al terror.
Leo Drácula: El no muerto.
Vuelvo a su amante oscuro. Vuelvo al conde.



Pobre doctor Seward, pobre Harker... Pobres todos.





P.D: Os prometo que la próxima entrada será el nuevo especial de El Silencio e Invierno Nuclear. Palabra.

domingo, 22 de agosto de 2010

La carretera está llena de mierda.
Menos mal que la lluvia disipa el olor.

miércoles, 4 de agosto de 2010

¡No me gusta leer!

Lo he descubierto tras grandes reflexiones. Efectivamente, no me gusta leer. Me gusta que me cuenten historias, me gustan las nuevas sensaciones, me gusta que me lleven a países lejanos, me gusta conocer gente nueva, me gusta encarar desafíos, me gusta no entender ciertas cosas, me gusta no tener siempre razón...
Me gusta volar, pero no me gusta leer.


Y tú... ¿Me cuentas una historia?