viernes, 30 de octubre de 2009

Hablo de usted, y espero que no tenga constancia de ello

La veo pasar con su sonrisa y/o su cara de circunstancias. Que divertida, no sé con cual de las dos quedarme (¡con ambas, una a cada minuto!). Y hace gracia pero tengo miedo, con esa mirada escondida, esa mirada tan interesante. Esta vez no vuelven como siempre las Oscuras; esta vez será el balcón el que irá a posarse sobre ellas. ¿Qué opinará el poeta de esto? El poeta está muerto y ya no opina. No culpes a la tuberculosis (¡asesina de genios!), si no hubiese sido ella, el tiempo lo habría matado. O tal vez el suicidio, como a todo buen artista.


P.D: El primer paso: negación.

2 comentarios:

  1. ¿Cómo? ¿Quién lo dice? Además... usted debería estar comentando la entrada directamente inferior a esta xD

    ResponderEliminar